Cada transacción afecta la ecuación contable de una empresa. Puede tener lugar un doble cambio entre dos activos.
Las cuentas deben acreditarse y debitarse adecuadamente para seguir el Sistema de Doble Entrada. Una cuenta es un elemento de un sistema contable que se utiliza para clasificar y resumir las mediciones de la actividad empresarial.
De la discusión anterior, se puede decir que registrar transacciones de naturaleza similar relacionadas con ingresos, gastos, activos y pasivos al final de un período contable de un negocio en particular bajo los encabezados apropiados según principios y reglas de contabilidad en la declaración condensada y clasificada es cuenta llamada.
Para determinar las transacciones de débito y crédito, se utilizan en la práctica dos métodos.
Los métodos para determinar el débito y el crédito en contabilidad son;
- Reglas de oro.
- Método de Ecuación o Método Módem.
Se describen a continuación;
reglas de oro
Para identificar dos cuentas de una transacción, es necesario saber en qué clasificación se encuentran. Posteriormente, el débito y el crédito de cada cuenta se determinarán de acuerdo con las siguientes reglas;
- Cuenta personal: Se debitará a la persona o institución que recibe un beneficio y se acreditará a la persona o institución que otorga el beneficio. El receptor del beneficio – Débito
Dador del beneficio – Crédito - Cuenta de activo: El activo que llega a la organización a través de una transacción se debitará y el activo que sale del negocio a través de una transacción se acreditará. Ingresos de activos en – Débito
El activo sale – Crédito - Cuenta nominal o ingresos-gastos: Las cuentas relativas a gastos y pérdidas se debitarán y las cuentas relativas a ingresos se acreditarán. Gastos y pérdidas – Débito
Ganancias e ingresos – Crédito
MÉTODO DE ECUACIÓN
Según la opinión del contador moderno con base en la ecuación contable, débito y crédito para cada la transacción está determinada.
Con base en un aumento o disminución de los elementos de la ecuación contable se determinan las cuentas de débito y crédito. Los detalles de la ecuación contable se han analizado en el capítulo anterior.
La ecuación contable es Activos = Pasivo + Patrimonio del propietario.
- Activos = Patrimonio
- O bien, Activos = Pasivo + Patrimonio del propietario
- O bien, Activos = Pasivos + (Capital + Ingresos – Gastos)
Los elementos de la ecuación contable son A (Activos), L (Pasivos), C (Capital), I (Ingresos) y E (Gastos).
Para cada transacción, uno o más elementos de la ecuación contable cambian, es decir, alguien aumenta o alguien disminuye.
De acuerdo con este cambio o aumento, se determina una disminución de los elementos de débito y crédito. Bajo este método las reglas determinantes de débito y crédito son las siguientes;
- Activos (A) = el aumento es débito – la disminución es crédito
- Gastos (E) = el aumento es débito – la disminución es crédito
- Pasivos (L) = el aumento es crédito – la disminución es débito
- Capital (C) = el aumento es crédito – la disminución es débito
- Ingreso (I) = el aumento es crédito – la disminución es débito
Debe tenerse en cuenta que el capital aumenta o disminuye debido a un aumento o disminución de los ingresos y gastos, es decir, un aumento de los ingresos aumenta el capital y un aumento de los gastos disminuye el capital.
Las reglas para determinar el débito y el crédito según la ecuación contable se pueden mostrar de la siguiente manera.
Consulte nuestro artículo sobre Ecuación contable que explica en detalle cómo afectan las transacciones a la ecuación contable.